No hay tema ni álbum más emblemático para Iron Maiden que el ya clásico "The Number of the Beast". Como ya mencionamos en el tema -Metal- de la semana anterior, los años 80, eran una época oscura para el metal, donde cualquier hijo de vecino lo tildaba de satánico sólo por las carátulas de los discos o el nombre del grupo.
Cualquier excusa era buena para que la iglesia iniciase campañas de terror, llenas de ignorancia, mentiras y acusaciones infundadas contra los grupos que sólo buscaban hacer llegar su música a las mentes abiertas de los jóvenes con riffs reconocibles y memorables solos de guitarra.
El mejor ejemplo de éste comportamiento retrógrado se dio en Chile durante la que iba a ser la primera visita de Iron Maiden a Chile en 1992. Disntintos curas y pastores evangélicos -que ni siquiera merecen ser nombrados por nosotros, y lo más probable, todos pedófilos- presionaron al Gobierno de la época (Patricio Aylwin) para que Maiden no tocara en Chile debido al contenido "Satánico" de sus letras y videoclips.
Como buen chileno interesado en la música, éste caso me llamó profundamente la atención. En la época no conocía mucho de Iron Maiden -lo reconozco- pero siempre he creído en eso de ver las dos partes de la historia antes de emitir un juicio (a pesar que el tiempo me ha demostrado que lo que digan los curas es, en el 99.999999999999% de los casos, una mentira) seguí con mucha atención el tema, ya que era una banda que muchos de mis amigos apreciaban y la polémica en Chile fue muy grande. Recuerdo haber leído a los pocos días sobre una conferencia de prensa que dieron algunos integrantes de la banda y me llamó la atención un comentario que publicó uno de los periodistas y que deciá más o menos así: "Los muchachos de Iron Maiden se vieron tranquilos y hasta ayudaron a los periodistas a dar vueltas las cintas de sus grabadoras" (Recordemos que en 1992, por estos lados aún no existían las grabadoras digitales).
¿Eso hace un Satánico? ¿Un Satánico ayudaría a un miembro de la prensa sólo por la buena onda o le tiraría la grabadora por la cabeza? Punto a favor para Maiden, quienes posteriormente sí podrían dar su concierto en Chile, totalizando a la fecha 6 conciertos en el país y un DVD oficial con el último concierto realizado en Chile en 2011.
De la canción misma, nada que decir, nada que agregar. Un clásico por mérito propio, que logró traspasar las barreras de la época para hacerse conocida a nivel mundial, a pesar de las distancias y los problemas de comunicación propios de los años 80, donde -en la mayoría de Sudamérica- las Dictaduras hacian de las suyas decidiendo por todos qué musica era aceptable y qué no podía ingresar a nuestros países.La letra en sí misma, si bien sí habla acerca del Diablo, no tiene mención alguna acerca de que debamos alabarlo ni nada, en ése sentido no tiene mayor diferencia con alguna canción evangélica que habla acerca del Demonio y cómo puede entrar en tu vida; la diferencia está obviamente en que la música de Iron Maiden es mucho mejor.
Buen disco pero los que más influyeron en las bandas de fines de los 80's de metal extremo (Speed, thrash, hardcore) fueron Iron Maiden y Killers.
ResponderEliminar